Una falta de ortografía, o de gramática, la puede cometer cualquiera; y a veces no por desconocimiento, sino por despiste. Cuando se tiene que escribir muchas cosas, puede que se cometan errores, y no pasa nada, pero cuando una tienda vende por Internet tiene que cuidar todos los detalles.
Muchos clientes ven mal las faltas de ortografía, e incluso les ofrecen una peor impresión de la empresa. Y nos atrevemos a decir que algunos de ellos no compran en la tienda porque no se creen que haya una empresa o un profesional tras ella, o porque simplemente no ven garantías en la tienda.
Siendo este un aspecto tan importante, hay que revisar todos los textos de la tienda, desde los más básicos como el dónde estamos, qué hacemos, política de devoluciones, etc hasta las descripciones de los productos. Como para una persona es mucho más complicado detectar sus propios errores, lo mejor es contar con otros ojos que vean el texto con otra perspectiva.
Si escribimos envió en vez de envío se puede considerar un despiste “perdonable”, pero si vendemos bolígrafos y escribimos “volígrafo azul” entonces sí que hay un problema. Muchos clientes no se preocupan por ello y lo único que miran es el precio, las ofertas o cualquier otro aspecto, pero hay algunos que quieren algo más y están dispuestos a rechazar a una gran oferta a cambio de seguridad, de seriedad.
Ya hemos comentado en muchas ocasiones que para conseguir ofrecer una mejor impresión en los clientes, y una imagen de profesionales, es necesario un diseño profesional de la tienda, un sistema de pago seguro, un aval de que la tienda ofrece confianza en Internet y muchos otros aspectos, pero el cuidado de la redacción es también muy importante cuando se está vendiendo.
Si nos fijamos, podemos ver que incluso grandes medios cometen errores a diario, pero la diferencia entre ellos y tu tienda online es que ya cuentan con una gran reputación que hacen que se puedan incluso permitir esos errores porque sus usuarios ya los conocen. ¡Preocúpate de los pequeños detalles!