Si existe un producto altamente provechoso para comercializar en los mercados online ese es el de los videojuegos, películas, postales y fotografías. Nuestra cultura se decanta notablemente hacia lo visual. Incluso, esta predilección se puede interpretar como un rasgo de la naturaleza humana que nunca debe pasarse por alto.
El éxito de manifestaciones artísticas como el cine, la fotografía o la pintura dan cuenta de ello. Los negocios convencionales lo tienen en consideración; sin embargo, se equivocan totalmente en el modo de aprovechar esa circunstancia. La contraparte la tendremos en otra vía más barata y eficaz, como a continuación se tratará.
De inversión a lastre
Actualmente se despilfarran millonarias cantidades en campañas de publicidad que no sólo no consiguen aumentar la preferencia de los consumidores, sino que además provocan tal saturación en los medios de comunicación y en los espacios físicos que a la larga incordian y se vuelven una molestia para los clientes potenciales. Esto no es aprovechar como se debe la orientación visual de lo humano.
No es cuestión de exponerse tanto que no se deje ver nada, sino de exhibir variedades y alternativas de productos de un modo sencillo, cercano y atractivo para las personas.
Una excelente plataforma
Los negocios de productos audiovisuales pueden aprovechar todo lo anteriormente comentado dando a conocer sus productos por medio de la red, de la mejor manera posible. No se necesitan carteles publicitarios en los periódicos o en las revistas para ofertar una película en DVD, cuando puede exponerse un fragmento o una captura de la misma, de manera legal, en una tienda online para acercarla a los posibles compradores.
No es preciso repartir trípticos en la calle, vestir a personas con ridículos atuendos o gastar en un anuncio publicitario, insuficiente y caro, en la radio o la televisión, para promocionar un producto audiovisual que puede hablar por sí mismo, con todo el tiempo y los recursos multimedia necesarios, en una página de internet.
Las plataformas de venta online tienen la ventaja de no acercarse a la gente como si fuesen cifras a calcular, sino como personas con las que se quiere entablar un diálogo lleno de confianza y comprensión. Ver con la gente lo que se quiere o necesita y no obligarles ver lo que sea para llamar su atención: ésa es la clave del mercado contemporáneo y eso sólo es posible en la red.